Alejandro Agresti

El trabajo más peligroso del mundo Como si nada hubiera sucedido

El trabajo más peligroso del mundo

Es difícil imaginar una película (o novela, cuento, obra de teatro; en fin, un relato de cualquier tipo) sobre hacer cine que no involucre, de una u otra forma, las condiciones materiales de producción. Hacer cine es caro; hacer cine implica, entre muchas otras cosas, viajar, comprar y alquilar objetos, reservar locaciones, coordinar con gente. Resulta llamativo, sin embargo, que las tres películas en cuestión pongan las condiciones materiales tan en primer plano, cuando films argentinos anteriores o posteriores priorizan conflictos relacionados con los vínculos humanos, y las cuestiones materiales tienen, como mucho, una relevancia periférica(...)
Encerrados en el agujero interior Como si nada hubiera sucedido

Encerrados en el agujero interior

Tal vez valga la pena distinguir entre dos tipos de feísmo: el que aprovecha una tendencia o una moda, y entonces ofrece pinceladas gruesas, detalles de monstruosidad, abordajes tímidos que apenas ocultan la vergüenza —cineastas que, sospechamos, filmarían algo diferente si el viento soplara en otra dirección—, y, por otra parte, el que le da forma a un cuerpo de obra, el que gracias al empecinamiento y una visión del mundo desarrolla un estilo distinguible. Esa es la distancia fundamental entre "Los insomnes" (1986), de Carlos Orgambide, y "Kindergarten" (1989), de Jorge Polaco(...)