Andrés Di Tella

Pablo Piedras: “La academia es una plataforma de pensamiento genial, pero creo que en algún momento hay que tomar distancia para producir algo diferente” Conversaciones

Pablo Piedras: “La academia es una plataforma de pensamiento genial, pero creo que en algún momento hay que tomar distancia para producir algo diferente”

Cuando ibas a algún congreso en el extranjero, solo se hablaba de "Los rubios", de la controversia con "M" de Prividera; todo muy vinculado al boom de la memoria y a validar la idea de un proyecto de renovación cinematográfica a partir de elementos puramente asociados a los estudios sobre memoria y los estudios culturales. Siempre tuve una especie de revuelta personal en relación a los estudios que hacen que el cine diga o ejemplifique los proyectos académicos e ideológicos de determinadas modas académicas. Me parece reduccionista a nivel estético. El problema fundamental era que no analizaban formalmente las películas(...)
“En el descubrimiento de la primera persona me choqué contra los límites del documental más convencional” Conversaciones

“En el descubrimiento de la primera persona me choqué contra los límites del documental más convencional”

La carrera de Andrés Di Tella comenzó en la década de los ochenta, años en los que trabajó en films de Alberto Fischerman y se dedicó, también, al periodismo y la publicidad. Luego de realizar varias películas de temáticas estrictamente políticas, su obra fue moviéndose hacia terrenos cada vez más íntimos y personales. En esa línea realizó documentales como "La televisión y yo", "Fotografías" y el reciente "Ficción privada". A raíz de la edición de su segundo libro, "Cuadernos", lo entrevistamos para Taipei, con la intención de recorrer su obra.
El hijo de Solanas Exploraciones

El hijo de Solanas

La estructuración entre el material de archivo y el monólogo de la voice over da cuenta de dos películas que hacen dialogar dos épocas y, sobre todo, dos variables del género, que se mantienen en tensión: el “terreno de la historia (lo intelectual) y de la memoria (lo afectivo)”. A partir de estos diálogos se presenta el problema de cómo pensar las dinámicas de los conflictos histórico-políticos en la dimensión íntima de las películas familiares. El autor vuelve a ellas obsesivamente, intentando encontrar algún signo del impacto de la historia política y social en los registros fílmicos de la historia familiar(...)